21 de marzo de 2012

LO QUE LA PRIMAVERA ALTERA

Ayer dimos la bienvenida a la primavera,  la estación que más me gusta del año. Más horas de luz, temperaturas suaves que animan a salir a la calle,despertarte por la mañana con el canto de los pájaros,menos ropa...,todos ellos factores que hacen que en estos meses del año me sienta más alegre y con más ganas de hacer cosas. 

La cantidad de luz natural diaria que las personas disfrutamos influye en nuestra salud, hasta el punto de que en los paises con pocas horas de luz se dan más casos de depresión. De esta manera el mayor número de horas de luz, en la mayoría de los casos, conlleva mayor bienestar, ya que la luz estimula la produccion de serotonina, hormona de la felicidad, a la vez que suprime la producción de melatonina, la hormona que controla la duración y el ritmo del sueño.

Pero, ¿quién no ha sentido también con la entrada de la nueva estación mayor cansancio, sensación de sueño durante el día...? Y es que para muchas personas el cambio de estación conlleva la tan conocida astenia primaveral, cuyos síntomas principales son fatiga generalizada, somnolencia diurna, desmotivación, dificultades para concentrarse, aturdimiento, irritabilidad, falta de apetito y disminución de la líbido.

Entonces ¿ es la astenia  primaveral sinónimo de depresión o de enfermedad ?

Los especialistas coinciden en que la astenia primaveral no está respaldada por ninguna evidencia científica.Es más, la mayoría de ellos duda de la existencia  de la misma, y defienden que ni es una enfermedad ni es necesario tomar estimulantes o vitaminas que levanten el ánimo.



¿Cómo podemos explicar la apatía  y el decaimiento que algunas personas experimentan con la entrada de la primavera?


- Una explicación que han dado algunos especialistas es que en primavera se produce una disminución de las endorfinas, la hormona de la felicidad, lo que explicaría esa apatía.    

- Pero la explicacción más viable es que la fatiga es consecuencia de un proceso que experimenta nuestro cuerpo al tener que adaptarse a las nuevas condiciones de luz y temperatura, humedad y presión atmosférica, que no dura más de dos semanas, por lo que no cumple los criterios de la depresión.
¿Quienes sufren los síntomas de la astenia primaveral?

14 de marzo de 2012

UN POCO DE SENSIBILIZACIÓN PARA HOY MIÉRCOLES


El primer paso para la aceptación es el conocimiento. La ignorancia o falta de información, o la información sesgada, pueden hacer que las personas elaboren unas creencias que nada tienen que ver con la realidad, creencias que en la mayoría de los casos pueden conllevar, miedo, y consecuentemente rechazo.

Por eso hoy voy a hablar de una realidad que gracias a mi trabajo he vivido muy de cerca, la ENFERMEDAD MENTAL GRAVE (depresión mayor, trastorno bipolar, esquizofrenia, algunos trastornos de la personalidad…).

Mi objetivo cuando terminéis de leer el post es haber despertado en cada un@ de vosotr@s algo de empatía, es decir, que hayais sido capaces de  poneros en el lugar de esas madres y padres que han tenido que ver cómo la vida que habían soñado para su hij@ se veía interrumpida por la enfermedad, de ese hij@ que de repente un día se encontró de golpe y sin   buscarlo, con la enfermedad y se vio obligado a aparcar su vida durante un tiempo y a renunciar a sus sueños,de ese hombre/mujer que cuando por fin había logrado lo que más deseaba, formar una familia, vió como se desmoronaba su sueño al enfermar..., y que logréis entender aunque sea mínimamente qué  sienten, la incomprensión, la soledad, su sufrimiento, sus miedos…, al vivir en una sociedad que los desaprueba severamnete porque no se ajustan a lo que se considera "normal".
                                                                                 
Diferentes estudios  han analizado las actitudes existentes en la población general hacia las personas que padecen algún tipo de enfermedad mental grave y crónica:
Compasión: la reacción más frecuente hacia las personas con Enfermedad mental grave es la de compasión, que se traduce en comportamientos de sobreprotección por parte de los familiares.
Miedo: Además y según qué enfermedad mental, el estereotipo de peligrosidad es el más frecuente en la población general. Esto ocurre por ejemplo en la esquizofrenia, una de las enfermedades mentales graves más estigmatizadas.

Rechazo: El miedo y la percepción de peligrosidad conllevan actitudes de evitación, rechazo y segregación. Así, no es atípico que los amigos se alejen de la persona con enfermedad mental, lo que hace que estas personas estén condenadas al aislamiento y la deseperanza.Por otro lado,  la anticipación del rechazo social les lleva en muchos casos, a ellos y a los propios familiares a ocultar la enfermedad.
Discriminación laboral: El principal ámbito de discriminación para las personas con enfermedad mental es el laboral, con sus consiguientes repercusiones económicas. Experimentan muchas dificultades o imposibilidad para encontrar un trabajo sin la ayuda de las instituciones.
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El papel de los medios de comunicación.
Los medios de comunicación tratan muy poco este tema, prácticamente no hay noticias sobre la enfermedad mental crónica y cuando las hay se asocian a sucesos negativos. Existe un abuso de términos relacionados con las enfermedades mentales graves y crónicas derivados de la palabra loco y otros más peyorativos, y suele asociarse la enfermedad mental grave con actos violentos o delictivos.
Cómo vive este rechazo social la persona con Enfermedad mental…

La percepción de ser rechazados por la sociedad les lleva en la mayoría de los casos a:
- Rechazar la enfermedad, ya que aceptarla supone para ellos ser rechazados por la sociedad.
- Autolimitarse en el trabajo: la mayoría de ellos ni se plantea el trabajar porque no confían en poder hacerlo.
- Desarrollar una baja autoestima, percibiéndose inferiores a    los demás y fracasados.
- Aislarse del mundo, recluyéndose en casa sin tener contacto con nadie más que con la familia.
No hay nada mejor para conocer algo que haberlo experimentado en primera persona. Lo que he vivido profesionalemnte con estas personas dista mucho del concepto de peligrosidad y locura que aún hoy impera en la sociedad, gracias en parte a la mala propaganda  que los medios de comunicación han llevado a cabo, y a los comportamientos desadaptativos que estas personas muestran  puntualmente cuando hay una recaida y que la sociedad no está preparada para interpretar adecuadamente. Personas inteligentes, agradecidas, generosas, solidarias, amables y sobre todo muy luchadoras, que me han hecho sentir respetada, querida, valorada y muy cuidada.

Y ahora que tengo la oportunidad de trasladar mi experiencia a más gente, no quería desaprovecharla. Es importante que aprendamos a respetar y aceptar lo diferente, y que seamos capaces de aceptar y comprender los pensamientos, sentimientos y comportamientos atípicos que estas personas en momentos puntuales y fruto de la enfermedad pueden mostrar. Y la forma de hacerlo es informándonos sobre este tipo de enfermedades y no dándoles la espalda.

Este post no estaría completo si no os os diese la oportunidad de aclarar las dudas que posiblemente tengais en relación  a este tipo de enfermedades. Aprovechad este espacio y planteádmelas. Estaré encantada de resolverlas.

GRACIAS A TOD@S POR PERMITIRME EXPRESAR MI EXPERIENCIA.

6 de marzo de 2012

Las normas educativas: el manejo de las excepciones.



Tod@s sabemos que l@s niñ@s necesitan del establecimiento de normas que les informen de qué se espera de ellos y cuáles son las consecuencias de la violación de esas normas. Esto contribuye a su bienestar y desarrollo psicológico. También es conocido por padres, madres y profesionales de la educación y la psicología, que para que den su fruto, las normas deben aplicarse con regularidad. No conseguiremos que el/la niñ@ aprenda hábitos y costumbres adecuadas si los consejos y el ejemplo que se le da, los refuerzos o castigos que se utilizan, las órdenes, la facilidad con la que se cede ante sus protestas, etcétera, varían de unos días a otros en función del humor, el cansancio o la compañía con la que nos encontremos los adultos responsables de controlar esas normas. En este sentido, los principios que guían la relación de los adultos con los niños en el establecimiento y aplicación de las normas han de ser claros, firmes y constantes. Los padres deben aplicar las normas de forma continuada a lo largo del tiempo.

Pero vamos a imaginarnos que un día emiten por televisión una película de especial interés para nuestr@ pequeñ@ que termina algo más tarde de la hora acordada de ir a dormir. ¿Qué hacemos?¿Obligamos al niño a que se vaya a la cama sin terminar de ver la película?¿Dejamos que permanezca despierto hasta que termine y nos saltamos la norma establecida?

La realidad es que las excepciones ocurren, y el equilibrio entre el cumplimiento de las normas y las excepciones a tales normas es un aspecto delicado que hay que saber aplicar. Por ello es conveniente tener presentes algunas consideraciones en relación a ellas.


Es importante tener presente que las excepciones afectan menos al aprendizaje de hábitos regulares cuando…

- se realizan en circunstancias excepcionales. Por ejemplo, es más aconsejable que un niño se coma una bolsa de golosinas el día de su cumpleaños que un día cualquiera en el que no habría motivo para hacer la excepción.

- el hábito ya está empezando a quedar establecido o ya lo está por completo. Por ejemplo, sería más adecuado que un niño se vaya más tarde a la cama cuando ya lleva muchas semanas acostándose a su hora que cuando sólo hace tres días que los padres decidieron iniciar la enseñanza de esta costumbre.

-   tienen una intensidad moderada. Por ejemplo, es más aconsejable que el niño rompa la norma un día comiendo una bolsa de gusanitos en vez de un lote de chucherías.


Resumiendo, podemos concluir que las excepciones no suponen ningún problema cuando son verdaderamente eso, EXCEPCIONES.